El crecimiento de una PyME no sólo se debe a su capacidad productiva y su facturación. Sino que es un conglomerado de sucesos que nos dan la idea de la necesidad de dar un salto de calidad. Uno de ellos es la normalización.
La norma ISO 9001 tiene origen en la norma BS 5750, publicada en 1979 por la entidad de normalización británica, la [British Standards Institution] (BSI).
Su creación fue la estandarización de los procesos de gestión de las empresas. De esta manera, la universalización del «lenguaje» empresarial favorecería el comercio entre empresas a nivel nacional e internacional.
Pero más allá de la visión de la norma, la misión que persigue es el ordenamiento y la organización de las pequeñas empresas en tiempos de crecimiento.
El concepto de «proceso» da la pauta de ordenar el trabajo en función de entradas y salidas. Abarcando desde la metodología de trabajo, pasando por la calidad, terminando en la correcta documentación y comunicación de las tareas.
En Argentina, existen diferentes entidades que brindan asesoramiento para la correcta certificación, se diagraman auditorias peridodicas y que mantienen informado al empresario de las novedades con motivo de adelantarse a los requisitos de renovación de la misma.
La certificación no sólo es una garantía de calidad para nuestros clientes y proveedores, sino que es una herramienta para que el crecimiento sea un desarrollo continuo, que brinde posibilidades de mejora, revisión y cambios de lo «coumunmente establecido» siendo fundamental estar actualizado con las tendencias imperantes en materia de gestión.
para felicitarlos por su blog
Quiero indicarles una herramienta para determinar el riesgo
http://selobu.blogspot.com/2010/04/evaluacion-del-riesgo.html
espero les sea de utilidad
Muchas gracias por el aporte! Saludos!
Si bien es cierto que un sistema de gestión de la calidad puede ser una herramienta fantástica para mejorar la competitividad de la empresa, yo opino que no debe llegarse a la instancia de certificación sin antes haber instalado un sistema de gestión de la calidad (no certificado) que funcione en la empresa, más allá de las exigencias de las normas.
Si ese sistema comienza a producir resultados consistentes, entonces se pueden iniciar las acciones para adaptar lo existente (que YA funciona) a los requerimientos normativos con el objetivo de obtener un certificado.
Creo que de este modo la pyme no se burocratiza ni se desenfoca, consiguiendo mejorar su calidad y competitividad.
http://comoservirconexcelencia.com/blog/el-motor-de-un-sistema-de-gestion-de-la-calidad/.html